martes, 24 de enero de 2012

LAS DIABÓLICAS

Disculpen Vds. por la interrupción momentánea del relato de mis aventuras por esos mundos de D. Después de haber soportado un interrogatorio, digno del más espeluznante tercer grado, no me encuentro con humor para buscar hechos interesantes.

Exactamente, he ido a renovar mi carnet de conducir a una de esas oficinas autorizadas por la DGT. Me han atendido dos señoras inmediatamente, ya que era el único cliente a la vista. Ambas jóvenes me iban pasando, de una a otra, para someterme a diversas pruebas diabólicas, examen de la visual ojo a ojo (cuando nunca he conducido guiñando ninguno de los dos), toma de tensión, revisión de la capacidad auditiva y otras barrabasadas de similar escarnio. Después de una hora de tortura y decirme que soy un asco,  me han autorizado un carnet para un año, que recibiré en mi domicilio. 
Ya sé dónde no voy a ir el año que viene.

8 comentarios:

  1. Es cuestión, Don Bwana, de acertar con el Centro Psicotécnico adecuado porque ahora son ellos los que directamente tramitan todo y deciden para cuanto tiempo será el nuevo carnete.

    Pueden recomendar a la D.G.T. que sea para un periodo de entre uno a cinco años a partir de los 70. Y hay que caer en el que el "analizador" sea un tipo simpático que meta en el ordenador que está Ud. fenomenal para otros CINCO AÑOS MÁS.
    Todo depende de ese individuo.

    ResponderEliminar
  2. Vealo por el lado positivo, y es que salvo que haya omitido el detalle, no le han metido nada por el culo ni le han tocado nada sensible.

    A mí me hicieron la prueba y al ver que descongestioné las listas de espera de la seguridad social (no recuerdo si me cepillé a 6 o 7 durante la prueba) me renovaron el carnet por 10 años.

    Me duele ser tan duro con Tella pero percibo una incorrección en sus datos, la cifra a partir de la cual recomiendan eso es la de 50... no hay de qué por el cable Bwana.

    Estaría pensando en nuestra querida y añorada Gallinácea.

    ResponderEliminar
  3. Hace unos años pasé por un sitio parecido (que también estaba vacío) en el que me hicieron usar todos los aparatos que allí había, máquinas infernales en las que no acertaba ni una. Me dieron el apto, sí, pero salí de allí como si hubiera hecho una oposición.
    La siguiente vez fui a uno de los llamados "coladeros" (que estaba a tope de clientes) en el que tampoco acertaba a ver las últimas filas, ni oía, ni tenía tensión, pero me dijeron que no pasaba nada.
    La venganza se sirve en plato frío, Bwana. Cuando reciba su carnet díganos cuál es ese centro siniestro (o al menos la zona, para ubicarlo) al cual no debemos ir nunca jamás.

    ResponderEliminar
  4. D. Javier:
    Pues se nota que no he acertado con el individuo y me han tocado un par de extremistas de la peor calaña.
    Procuraré orientarme mejor el año que viene.

    ResponderEliminar
  5. D. isra:
    Por más que lo intento no le veo ningún lado positivo. Si, al menos, las señoritas hubieran estado de buen ver, habría merecido la pena el experimento, pero es que parecían primas de la Gallinácea.
    Se agradece el cable, pero ya me he confesado.

    ResponderEliminar
  6. Sabe que ocurría, que no desayunan con olbran

    ResponderEliminar
  7. Dª maharani:
    No me recuerde esas máquinas infernales que todavía tiemblo. Sobre toda una en la que hay que mirar con el ojo izquierdo una bolita que no debe salirse de una raya serpenteante y, con el derecho, simultáneamente, hacer lo mismo con otra bolita. Cada mano controla lo que ve su ojo; una atrocidad, vamos.
    Haré la denuncia en su momento si se me quita la escama por el follón Megaupload..

    ResponderEliminar
  8. D. MAMUMA;
    Creo que tiene razón y que todo es un problema de estreñimieto.

    ResponderEliminar